FUENTE / ARTÍCULO COMPLETO:
El Artista terapeuta es una profesión moderna donde un artista aprende ciertas disciplinas del ámbito de la psicología y realiza talleres centrados en desbloquear la expresión y centrados en hacer que las personas se sientan mejor. Normalmente suelen ser artistas plásticos, músicos, actores, cómicos y bailarines. Aunque todas las formas artísticas y creativas pueden colaborar. Incluso los escritores, puesto que escribir un libro a veces también ha sido una terapia para su autor. En resumen, la creación de una obra es terapéutica, vuelve a centrarnos en nuestro ser.
Objetivos del arte terapéutico
Aunque el principal objetivo en el Art Therapy es que la persona se sienta mejor, yo creo que también destacan otros tres objetivos:
1- El primer objetivo que veo en el Arte terapéutico es la creación de una experiencia vital y artística. Al hacer una actividad creativa la persona se concentra y activa sus capacidades mentales creativas. Hay personas que nunca han tenido una experiencia artística, nunca han realizado una actividad pictórica, por ejemplo. Entrar en un taller preparado para ello es un punto fundamental para poder iniciar el tratamiento. Además, la toma de contacto con los materiales y útiles artísticos es física y provoca un impulso, es decir, aporta energía a la persona.
2 – El segundo objetivo fundamental es la exteriorización de sentimientos, sensaciones, ideas y otros elementos abstractos que forman parte de nuestra psique. Para realizar esta exteriorización, es necesario que la persona primero realice una mirada hacia su propio ser, lo que siente dentro. La persona debe ser capaz de reconocer dentro de sí mismo un contenido o mensaje, a veces consciente, otras subconsciente. Ese mensaje es el que puede ser exteriorizado, incluso del modo más abstracto.
3 – Un tercer objetivo en el arte terapéutico es la reflexión sobre la obra creada por parte del propio creador. Contemplar la propia obra y comprender su propia creatividad. Junto a esta comprensión de sí mismo, se debe generar una expansión del ser, abrirse a nuevas ideas y sentimientos, ampliar su círculo vital y así aceptar nuevas perspectivas. La persona se supera a si misma y a sus circunstancias.
Salir de la desarmonía para lograr la armonía.
La salud es la armonía, la enfermedad en una completa desarmonía. Para lograr armonizar de nuevo nuestro ser, todas las técnicas son buenas, y las técnicas artísticas se vuelven más valiosas que nunca.
El arte terapéutico solo puede comenzar cuando la persona quiere recobrar su armonía interior, y para ello acepta realizar la terapia, aprenderla y lograr sus objetivos.
La desarmonía es un Ser roto en mil pedazos. La armonía es la unión de todas las partes que forman un Ser. Estas partes se unen y relacionan entre sí gracias a una mirada de conjunto, a una comprensión y a una toma de conciencia: El propio Ser, quienes somos.
Se debe mirar desde fuera para ver el conjunto y poder armonizarlo. Salir de un punto concreto para situarse en un conjunto capaz de volver a unirse y ver que realmente somos una armonía única e irrepetible.
El pegamento siempre es el mismo, el amor. Si no existe amor no existe unión del ser, no tiene sentido la vida (no se puede sentir), no se puede crear la armonía.
En este aspecto, las técnicas de meditación van por el mismo camino y son igual de sanadoras.
The Estate, El estado, de William Kurelek. Cortesía del Wynick/Tuck Gallery, Toronto, Canada.
La clave de la terapia con las artes
La creatividad forma parte de la esencia humana, de lo que nos diferencia de los animales y plantas.
Además, la creatividad tiene el poder de generar la visualización, es decir, gracias a ella podemos soñar, recordar, relacionar ideas, sueños y recuerdos, y también, gracias a la imaginación damos forma a lo invisible, a lo desconocido: los miedos, los deseos, el amor…
Cuando una persona aprecia su propia creatividad está apreciando y reconociendo una parte de su ser, y así, está aumentando su propia autoestima y auto-conocimiento. Cuando la persona tiene más autoestima está reforzándose a sí misma y haciéndose más fuerte frente a los retos de la vida. Con la fuerza de espíritu es con la que un ser humano puede mantener su salud, física y mental frente a todo contratiempo. Es simplemente por esta razón que el arte puede ser una auténtica medicina, pues nos pone en contacto con nuestra esencia.
Listado de personas que pueden beneficiarse del arte terapéutico:
- Personas con depresión y/o ansiedad. También el stress y otros problemas emocionales.
- Personas con minusvalías.
- Personas que han sufrido un trauma o shock.
- Personas que han estado en una guerra o conflicto armando.
- Personas maltratadas o víctimas de violencia doméstica
- Enfermos de cáncer u otras enfermedades que obligan a permanecer mucho tiempo en el hospital.
- Personas que por el motivo que sea, se encuentran desubicados, perdidos en la vida, enfadados contra la sociedad, con problemas psicológicos,
- Personas con problemas de comunicación, problemas interpersonales (comunicación con los demás) e intropersonales (comunicación consigo mismo).
El valor principal del Arte Terapéuta
El artista – terapeuta ejerce una práctica artística centrada en ayudar a los que sufren. El objetivo del arte terapeuta es ayudar a las personas a cambiar su forma de ver la vida. No podemos cambiar la vida pero si podemos cambiar nuestra actitud frente a los problemas y el sufrimiento que forman parte de la vida.
Los arte terapeutas tipo Payaso se centran más en la terapia con la risa, como valor vital principal. La risa y lo cómico para abrir corazones hacia lo bueno que existe en la vida.
Las artes visuales tienen como uno de los valores más importantes la creación y la belleza. En mi opinión, cuando una persona busca y logra expresar la belleza significa que su corazón y su mente están en armonía, en paz. La belleza en este caso es sinónimo de lo bueno que existe en la vida, por muy elemental que sea.
Las artes físicas como el teatro y la danza son excelentes para mover la energía interna, con la cual el paciente puede volver a reconstruirse.
En definitiva, la voluntad del artista terapeuta puede lograr que la voluntad del propio paciente empiece a colaborar con su recuperación.
En 1938 el artista Adrian Hill, excombatiente de la 1º guerra mundial y enfermo de tuberculosis, vió que al realizar dibujos se sentía mejor de su enfermedad. Este artista acuñó el término Art Therapy en 1942 y promovió la creación de talleres artísticos para los enfermos de larga duración en hospitales.
En 1946, otro artista inglés, Edward Adamson conoció a Adrian Hill y se unió a él en su fomento de este tipo de terapia con artes en los hospitales, creando además una gran colección de obras: La colección Adamson.
La artista terapeutica Deborah Koff-Chapin desarrollo una técnica llamada Dibujo de contacto (Touch drawing), donde las manos crean las formas rozando el papel, que al estar tocando una superficie pintada se va manchando conforme a la presión que hagan las manos. Al levantar el papel de la superficie se puede ver la obra. Touch Drawing
Pintura de Deborah Koff-Chapin
FUENTE / ARTÍCULO COMPLETO: